Sin quitarle ni ponerle Oswaldo Villaseñor Si al día de hoy se tiene que hacer un balance de la administración de Mario López Val...
Oswaldo Villaseñor
Si al día de hoy se tiene que hacer un balance de la administración de Mario López Valdez, de manera rigurosa, bien podríamos decir que a este gobierno no le habrán de salir las cuentas.
Y es que pensar que el gobierno de Malova dejará un gobierno mejor que él que heredó, de verdad, está en chino.
De entrada, habría que decir que él heredó un gobierno con una deuda de poco más de 2 600 millones de pesos y entregará con una administración- según se ha adelantado- con una deuda de poco más de 20 mil millones de pesos.
En materia de seguridad, este gobierno heredó una cifra nada honrosa de poco más de 6 mil asesinatos en todo el sexenio y esta cifra ya la alcanzó el gobierno de Malova y todavía la queda un año para seguirle sumando.
Desde luego en el sexenio anterior las desapariciones forzadas no pintaron, mientras que en este sexenio ha sido el pan nuestro de cada día y desde luego en este apartado no se tiene un registro confiable de cuantos van o cuantos son.
En obra pública, si bien hay que destacar que si ha habido bastante obra, ésta no va en proporción del aumento en los porcentajes de presupuesto ejercido, el monto de los endeudamientos y de paso la calidad de la misma, ha sido cuestionada, así como su utilidad pública en muchos de los casos.
En materia de combate a la corrupción que fue otra de sus grandes promesas de campaña, quedará bastante rezagado a grado tal de que no cumplió eso de que en su sexenio no habrá nuevos ricos ni familiares incómodos, amén de que la espada de la justicia sigue sin ser estrenada.
En materia de educación, si bien es cierto su medición se ha basado en cantidad de acciones que permitan decir que se tiene una mayor cobertura y se ha dejado de lado la calidad de la misma, también habría que decir que nunca se había cuestionado ni metido en el hoyo del sospechosismo a esta Secretaría como se tiene hoy en día.
Así, si se hace un análisis riguroso de área por área, seguramente las cuentas no salen, de ahí la pobre calificación que como administración alcanza este gobierno.
Eso sí, este gobierno tiene a su favor que todavía le falta un año para intentar cerrar fuerte y la promesa de su gobernador de que no habrá año de hidalgo, lo cual por el bien de Sinaloa, ojala y se cumpla y no pase a la historia Malova como peor gobernador que haya tenido el Estado porque eso significa que a Sinaloa y a los sinaloenses nos fue mal también.
Así, sin quitarle ni ponerle
Habrá que estar pendiente