San Ignacio, Sinaloa. Las familias que decidieron edificar sus casas a las orillas del terreno que ocupa la zona de la Mesa en San Igna...
San Ignacio, Sinaloa. Las familias que decidieron edificar sus casas a las orillas del terreno que ocupa la zona de la Mesa en San Ignacio, se niegan a desalojar el lugar a pesar del riesgo que representa vivir ahí, sobre todo en la temporada de lluvias.
José Martín Larrañaga Zúñiga, director de Planeación Urbana del municipio indicó que desde hace más de un año se les entregó un aviso a estas cuatro familias para que desalojaran dicho terreno, pero que hasta la fecha el que no tengan otro lugar a donde mudarse, las ha obligado a permanecer en el lugar.
El funcionario señaló que cada año antes al inicio del temporal de lluvias, se les advierte sobre los riesgos que corren pero ellos argumentan que no tienen a dónde ir y que carecen de recursos económicos para tan siquiera adquirir un terreno.
Indicó que la postura del alcalde Amado Loaiza Perales hacía estas familias, continúa siendo la misma que es la de no perjudicarlos con el desalojo, pero que también teme que vaya a suceder una desgracia en caso de que el paredón llegue a deslavarse y termine sepultándolos, por lo que dijo que buscarán la manera de ayudarlos.
Esmeralda Pardo Flores, es una madre de familia quien junto con su marido decidieron edificar su humilde choza en ese lugar y dice estar consciente de que por ser propiedad del ayuntamiento, en cualquier momento tendrán que desalojar.
Larrañaga Zúñiga, agregó que aparte de que este lugar es zona de riesgo, no cuentan con los servicios básicos como lo es agua potable, drenaje y energía eléctrica, por lo que lo ideal sería que fueran reubicados a un terreno legal en donde hasta podrían acceder a apoyos del gobierno.
José Martín Larrañaga Zúñiga, director de Planeación Urbana del municipio indicó que desde hace más de un año se les entregó un aviso a estas cuatro familias para que desalojaran dicho terreno, pero que hasta la fecha el que no tengan otro lugar a donde mudarse, las ha obligado a permanecer en el lugar.
El funcionario señaló que cada año antes al inicio del temporal de lluvias, se les advierte sobre los riesgos que corren pero ellos argumentan que no tienen a dónde ir y que carecen de recursos económicos para tan siquiera adquirir un terreno.
Indicó que la postura del alcalde Amado Loaiza Perales hacía estas familias, continúa siendo la misma que es la de no perjudicarlos con el desalojo, pero que también teme que vaya a suceder una desgracia en caso de que el paredón llegue a deslavarse y termine sepultándolos, por lo que dijo que buscarán la manera de ayudarlos.
Esmeralda Pardo Flores, es una madre de familia quien junto con su marido decidieron edificar su humilde choza en ese lugar y dice estar consciente de que por ser propiedad del ayuntamiento, en cualquier momento tendrán que desalojar.
Larrañaga Zúñiga, agregó que aparte de que este lugar es zona de riesgo, no cuentan con los servicios básicos como lo es agua potable, drenaje y energía eléctrica, por lo que lo ideal sería que fueran reubicados a un terreno legal en donde hasta podrían acceder a apoyos del gobierno.